El plano inclinado es uno de los seis tipos de máquinas simples. Tanto ventaja mecánica como la eficiencia de esta máquina dependen del ángulo de inclinación respecto de la horizontal y del coeficiente de rozamiento. De manera general se puede afirmar que el plano inclinado no es una máquina muy adecuada cuando requerimos mucha ventaja mecánica junto con una alta eficiencia.
    Desde un punto de vista más teórico, un plano inclinado se puede emplear para el estudio experimental de las condiciones de equilibrio en un plano inclinado, justamente para lo que fue diseñado el instrumento que muestra la fotografía. En él, sobre una base de madera horizontal apoyada sobre cuatro patas, se articula una bisagra de la que parte otra base o plataforma de madera, similar a la anterior, pero en la que se han horadado dos guías paralelas (que no se aprecian en la fotografía) preparadas para que circule un carrito (ausente en la fotografía). La inclinación del plano móvil se puede variar utilizando una palometa que lo ancla a distintas alturas sobre una escala vertical graduada. Esta escala, junto con la plataforma horizontal, también graduada, permite la determinación del ángulo de inclinación del plano. Por otro lado, en el extremo móvil de la plataforma de madera se halla una polea, destinada a enlazar mediante una cuerda al carrito con un peso que quedaría al aire. Este montaje permite establecer una relación de equilibrio entre el peso del carrito, la inclinación del plano y el peso situado en el extremo libre, sin necesidad de considerar el rozamiento, que prácticamente no interviene, ya que el carrito rueda, a diferencia del bloque que se deslizaba en el tribómetro.